Disfrutando el pasado jueves de un agradable paseo por la concurrida Calle3, tomo criterio de los problemas que le llegan a nuestro alcalde con sus empleados.
Resulta, como ya sabrán, que un año después de la firma de del Acuerdo de Condiciones Comunes, el Sr. Alcalde dice que queda anulado, que no es valido.
Tanto a Jesús Carbonell [UGT] como a Ángel Citores [CC.OO], les llevan los diablos, no pueden entender como una firma aprobada en Pleno, puede quedar unilateralmente "congelada". Pero claro tampoco era cosa de entrar en campaña con "tus" trabajadores en contra.
Lo que mas me fastidia es pensar que si hubiera ganado la oposición y hubiera desestimado los compromisos del Acuerdo, como se habría quedado afónico el alcalde saliente de gritar justicia para "sus" ex-trabajadores.
Cosas de la política
Digo Diego
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29 de noviembre de 2007
2 comentarios:
Pueso eso, donde dije...
Inquietante. Goleada del alcalde. Muy buena. Los trabajadores amenazan con movilizaciones. No me alegro de ello, pero si las hay, serán justificadas. Lo que yo creo es que habrá demandas judiciales hasta debajo de los clinkers de la Plaza Mayor.
¿Te has dado cuenta del tratamiento de la prensa a esta alcaldada?. En DB una tibia editorial, insulsa y neutra. Dos o tres referencias a mitad de página y fotografía de la manifestación en la Plaza Mayor. Ya sabes, cubriendo las espaldas.
Ayer la Palabra de Burgos, una vez mas abriéndose paso a codazos, publica en primera a cuatro columnas con el titular "Empleados municipales en pie de guerra". La editorial dura, crítica, valiente y comprometida. He podido conocer el ambiente que se respira en el funcionariado gracias a mis contactos y lamentablemente, pintan bastos.
Lo más bochornoso ha sido el farol preelectoral que se ha tirado Aparicio. No le creía capaz, pero lo ha hecho. La bajeza política tiene estas cosas. Una muesca más en su cinturón. La otra marca es la huelga general.
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