Hay personas, a las que admiro, que poseen la envidiable capacidad de enseñarnos las cosas cotidianas con un sello diferente, lo que vemos, oímos o tocamos a diario, nos lo presentan en un envase lleno de originalidad cotidiana.
Es el caso de Pedro Almodóvar, quizás el único superviviente de aquella incubadora creativa que fue "la movida madrileña". Almodóvar tiene esa capacidad de la que hablaba, ofrecernos las cosas que vemos todos los días empapadas en agua, tintada a veces, del color de la tragedia, el humor o el esperpento que son cosas muy del día a día.
Pedro Almodóvar ha presentado su blog. Es como el de todos, pero es distinto. Es cierto que contará con un equipo humano que le ayudará a realizar sus proyectos, pero en le fondo el espíritu de Almodóvar flota en su blog, hace que lo que se lee, se mira y se ve sea como un regalo individualizado y personalizado para cada uno que pase por allí.
Los genios son así.
Fotografía:Blog Pedro Almodóvar
Simplemente cotidiano
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27 de marzo de 2008
2 comentarios:
Reconozco a Almodóvar el mérito que se merece, pero no goza de mis simpatías cinéfilas.
Perdona JR, ¿dónde queda eso de la movida madrileña?. ¿Cómo fue todo tan efímero y ahora casi olvidado?
Yo tengo mi personal conflicto con Almodóvar: me gusta y no. Me gusta, precisamente, por lo que dices en tu entrada. A ver si logro aclararme de por qué no me gusta.
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